En una mañana suave, cuando la luz parece flotar y el mundo todavía respira lentamente, nace Butterfly Mind. Es una fragancia que captura ese instante en el que la mente se siente ligera, abierta, casi suspendida en el aire como el aleteo de una mariposa.

La salida se despliega con la claridad delicada del té blanco Bai Mu Dan y la suavidad floral de la Sakura. Es un aroma que no invade: simplemente se posa, fresco y sereno, como pétalos rosados cayendo sobre un jardín silencioso.

En el corazón surge una energía más viva. La feijoa, jugosa y verde, aporta un matiz inesperado que despierta curiosidad, mientras las hojas de avellana equilibran la composición con un tono natural, crujiente y limpio. Es el espíritu inquieto y creativo: el pensamiento que brinca de idea en idea con gracia y espontaneidad.

La base se asienta con una mezcla suave de cereza y almizcle blanco, envolviendo todo en un velo delicado y reconfortante. La estela es ligera pero persistente, dulce sin exagerar, íntima sin forzar.

Butterfly Mind es una invitación a soltar el peso,
a dejar que la mente se eleve,
a redescubrir la belleza de lo simple y lo espontáneo.

Un aroma para quienes viven con ligereza,
y encuentran inspiración en cada pequeño movimiento del día.